Soy teruki
Hoy me he encerrado en casa. En realidad había quedado con
unos amigos para ir a beber pero he pillado un resfriado y al final no he ido.
Me sabe mal pero quiero que se me pase pronto.
Gracias a eso he podido leer todas las cartas que recibí en
el Budokan. Me alegro que haya sido un día y un lugar que haya significado
tanto para vosotros. Gracias a los que estuvisteis presentes también durante el
parón y a los que llegasteis después de retomar las actividades. De verdad os
agradezco un montón que compartáis vuestros pensamiento conmigo.
Pues bien, hoy hay algo de lo que me gustaría escribir. El
otro día, cuando abrí la caja de las cartas en la oficina recordé una historia
de la que me gustaría hablaros...
La historia empieza hace 4 años, justo después de que la
banda entrara oficialmente en parón tras el concierto en el Budokan...Un día me
llegó un paquete a casa. Lo había enviado la oficina, y contenía las cartas que
había recibido tras el live, en una caja de cartón. Llamaron al timbre y al
abrir la puerta me encuentro con un empleado de la compañía mensajera. Y al
fondo, detrás de él, había un chico rubio con aspecto de host. Estaba hablando
por teléfono, pero al verme se me quedó mirando muy fijamente. Enseguida pensé
"quizás es que conoce An Cafe...". En cualquier caso, firmé el
resguardo del repartidor y cerré la puerta tras darle las gracias. Poco después
oigo como vuelven a picar al timbre. "No puede ser". Me acerco a la
mirilla de la puerta y veo que es el chico de antes. Yo finjo que no estoy en
casa; vuelvo a la habitación y me quedo mirando la caja de cartón en la que
pone bien claro "Ikinari Nyappy Legend. Nippon Budokan! AN CAFE
Teruki!" (・ω・;)
Unos días más tarde, me paso por el conbini que hay cerca de
casa y resulta que él estaba trabajando ahí! Empecé a comerme el coco: "Buaa,
¿qué hago? ¿hago ver que no le conozco, le hablo...?". Y mientras decidía
qué hacer, me empezó a hablar él a mí. Aunque estaba en mitad de la jornada me
dijo sin bajar la voz un pelo "Siento mucho lo del otro día! Es que desde
siempre me ha encantado An Cafe..." me dijo disculpándose. Se ve que vivía
en el mismo bloque que yo, y que aquel día, al volver a casa, se encontró con
el repartidor que llevaba la caja donde había escrito "Ikinari Nyappy
Legend. Nippon Budokan! AN CAFE Teruki!", y siguió al repartidor hasta mi
piso. Me dijo también: "No se lo diré a nadie! Sólo lo sabe mi hermano
pequeño y él ya me ha amenazado diciéndome que ni se me ocurra molestarte o me matará!
Lo siento mucho, de verdad...". A mí me dio pena, pobre, que hermano más
agresivo (risas)
Desde ese día, tuvimos varias ocasiones para entablar
conversación con más frecuencia: cuando nos encontrábamos en el ascensor, o en
la entrada, o en el conbini donde trabajaba. Me contaba cosas como: "el
otro día fui con mis compañeros de la universidad al karaoke y canté "Omocha".
A todos les gustó un montón!". Yo: "Que dices, si?? Por lo menos
canta Smile o algo así!". Por la
distribución del piso, compartíamos la zona del patio, así que nos preguntábamos
cosas en plan "la nevera va bien aquí? donde pongo la colada?".
Pasaron los días, y un día el chico rubio volvió a casa con el pelo negro.
"Es que tengo que empezar a hacer entrevistas de trabajo, así que me lo he
vuelto a dejar negro...". Yo le dije que la primera vez que lo vi acaba de
entrar en la universidad, como quien dice. ¡Cómo pasa el tiempo! Cuando An Cafe
retomó sus actividades me saludó con un "Felicidades! Bienvenido de nuevo!",
parecía muy feliz. A veces me lo encontraba en el bloque con algún miembro de
su familia, y llegó un momento en que toda su familia conocía An Cafe.
El año pasado me tuve que mudar a otra casa, y un día, mientras
hacía los preparativos para la mudanza, me lo encontré por casualidad en la
entrada y le expliqué que me iba a mudar. "Gracias por todo lo que has
hecho por mí hasta ahora. Me ponía muy contento cada vez que hablaba contigo.",
me dijo. El día de la mudanza me encontré una carta en el buzón.
Dentro del sobre había 5 hojas de papel ni más ni menos! En
la carta, el chico me explicaba cómo fue su encuentro con An Cafe, su encuentro
conmigo y también me hablaba de su propia vida. Me decía que se acordaba de
todas y cada una de las conversaciones que habíamos tenido, cosa que me
sorprendió muchísimo. Y por supuesto, me emocioné un poco. Le agradezco de
verdad que me la escribiera.
Y esta es la historia! ☆ Últimamente
estoy pensando en pasarme por el conbini donde trabaja!
****
Traducción: An Cafe Spain